“El personal que les gusta decir "sí" ...”

Acabamos de regresar de una fantástica y relajante semana a este encantador hotel en la tradicional ciudad costera de Abruzzo. Llegamos y nos molestó tener calor andando desde la estación (gran error). Inmediatamente nos acompañó al comedor y sirve un delicioso almuerzo; cuando nos explicó que nue… Más

Acabamos de regresar de una fantástica y relajante semana a este encantador hotel en la tradicional ciudad costera de Abruzzo. Llegamos y nos molestó tener calor andando desde la estación (gran error). Inmediatamente nos acompañó al comedor y sirve un delicioso almuerzo; cuando nos explicó que nuestro hijo es autistas y ha limitado y simple gustos en comida, un plato de pasta fresca con salsa de queso llegamos sin problemas, a pesar del hecho de que el servicio era técnicamente durante la tarde. Nuestra habitación era un "doble superior" y vale la pena el modesto cargo extra, ya que tenía una ducha todos nos enamoramos de, así como un balcón con vistas al mar Adriático y la playa privada. Tumbonas y una sombrilla estaban incluidas en el precio de la habitación. La zona de la piscina no estaba nunca llena; tenía un poco bañera de hidromasaje y un vestuario, además de una junta de buceo. Aparte de los sombreros tener que ser gastado en la piscina, el lugar era muy relajado y los socorristas tanto en la piscina y en la playa era muy amable y servicial. Gregory en el bar de probar su inglés (que son una rareza en esa parte del mundo) y era una fuente de conocimientos locales. Los recepcionistas eran también servicial. El hotel tiene un montón de bicicletas, gratis por la primera hora y luego un euro y horas después. Esta es una fantástica manera de moverse porque el hotel está al final de la rambla y autobuses son como el Yeti. En resumen, el hotel del Sr. Lorenzi es una estupenda relación calidad-precio y lo recomendamos si a cualquiera que quiera pasar unas vacaciones italiano tradicional en la playa en un lugar virgen.

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