“De regreso.”

Esta vez repetía y, además, con amigos. Al llegar nos encontramos con que el hotel tenía un problema técnico por el que no nos podían alojar. Gracias al buen hacer de Jiana su administradora, fuimos trasladados a un hotel igualmente hermoso del que también hablare: el Interhotel Central.

“Una ciudad de ensueño, todo limpio y ordenado, de otro mundo”

Siendo nuestra tercera visita, a esta increíble ciudad, sacada de un cuento, fuímos al hotel Humboldt Park Hotel, muy lindo, muy limpio y ordenado, cuartos cómodos, teníamos vista al río caudaloso que pasa enfrente, y que divide a la ciudad en dos, personal atento y amable, pendiente de lo que pudi… Más

Siendo nuestra tercera visita, a esta increíble ciudad, sacada de un cuento, fuímos al hotel Humboldt Park Hotel, muy lindo, muy limpio y ordenado, cuartos cómodos, teníamos vista al río caudaloso que pasa enfrente, y que divide a la ciudad en dos, personal atento y amable, pendiente de lo que pudiéramos necesitar, no tenía parking, pero estacionamos en la calle que corre por el hotel, mucha seguridad, no pasa nada. Se come muy bien, en restaurante a unos metros del hotel, por la misma vereda, no me acuerdo del nombre, centro muy interesante y todo ordenado y limpio una maravilla. para recomendar tanto el hotel como la ciudad, que además tiene un parque muy lindo abajo pegado al rio. años 2014

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“Un hotel muy vintage.”

Este hotel, como toda la ciudad, destila el recuerdo de una época brillante y sofisticada,cuando la realeza rusa hizo de Karlovy Vary su lugar de curación y descanso. No obstante, acostumbrada como estoy al nivel de las instalaciones turísticas españolas y a la profesionalidad de su personal, confi… Más

Este hotel, como toda la ciudad, destila el recuerdo de una época brillante y sofisticada,cuando la realeza rusa hizo de Karlovy Vary su lugar de curación y descanso. No obstante, acostumbrada como estoy al nivel de las instalaciones turísticas españolas y a la profesionalidad de su personal, confieso que tuve que hacer un pequeño reajuste de mis expectativas. Pronto comprendí que se trataba de otro mundo y a partir de ese momento logre disfrutar del hotel y de mi visita. La decoración, muy hermosa, con un sentido decimononico del lujo. Las habitaciones y todas las instalaciones del hotel brillan por su limpieza . El buffet del desayuno, muy completo, aunque típico del centro de Europa. El personal, atento, respondió siempre a mis menores requerimientos. El precio, como todo en esta ciudad, muy conveniente. A destacar una piscina y un jacuzzi a disposición gratuita de los clientes, en la sexta planta. La situación, óptima, a dos pasos del centro y frente a uno de los hermosos parques que adornan la ciudad. Al principio me sorprendió el hecho de que las habitaciones careciesen de aire acondicionado. Cierto que los días son cálidos pero las noches pueden ser muy frías. Lo dicho: otro mundo. Fue una experiencia interesante.

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