“Hotel curioso, inclasificable, pero al que volvería sin duda, por la amabilidad del ¿dueño?, y lo a gusto que estuve.”

Lo mejor: Hotel silencioso, q no tiene nada q ver con un 5* de España, pero el precio tampoco, y en la relación calidad precio, sale saldo positivo. Lo mejor, eficacia y excelencia en el desayuno. Perfecta y cómoda graduación del aire acondicionado. La puerta q seoara la alcoba de los baños y el p… Más

Lo mejor: Hotel silencioso, q no tiene nada q ver con un 5* de España, pero el precio tampoco, y en la relación calidad precio, sale saldo positivo. Lo mejor, eficacia y excelencia en el desayuno. Perfecta y cómoda graduación del aire acondicionado. La puerta q seoara la alcoba de los baños y el pasillo. Los muebles, nobles, de calidad y estilo, y también las alfombras. Que tenga maravillosas persianas en los balcones. Y la amabilidad y eficacia de, supongo, el dueño o encargado del hotel, atento en todo momento. Hablaba español con bastante corrección. Lo peor: El q le reciban a uno, en un supuesto hotel de 5*, o sea de lujo, en un mostradorcejo pequeño y en camiseta y vaqueros, pues nos chocó bastante. El personal brilla por su ausencia. Ese señor estuvo para todo, lo hacía todo. Sólo ví también a una señora mayor en la barra de la cafetería (q pudiera ser su madre). A pesar de ello, me sentí perfectamente atendida en todo momento, aunque tampoco estuve demasiado en el hotel. En una de las mesillas encontré un chicle en el cajón; pero por lo demás, encontré limpio todo. Si el recepcionista, encargado, dueño o lo que fuere, recibiera correctamente vestido, ganaría bastantes puntos. Por tanto, bastante inclasificable este hotel en España. Desde luego sería un 3*, con vajilla y mobiliario de 5* y mostrador de entrada de Hostal. Volvería.

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“Un rincón exquisito”

Hemos pasado tres días magníficos en este hotel tan agradable. Esta vieja casa de la Gascuña ha visto pasar la historia y sus propietarios la han reformado preservando el carácter burgués de una decoración exquisita aunándolo con un equipamiento moderno. Las habitaciones con balconadas amplias al j… Más

Hemos pasado tres días magníficos en este hotel tan agradable. Esta vieja casa de la Gascuña ha visto pasar la historia y sus propietarios la han reformado preservando el carácter burgués de una decoración exquisita aunándolo con un equipamiento moderno. Las habitaciones con balconadas amplias al jardín y la piscina al atardecer hacen que este hotel sea una base perfecta para conocer la región. A destacar también la profesionalidad y el trato cercano y amable de las personas que lo atienden. Un rincón exquisito.

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