“Ideal para desconectar de la tecnología y conectar con la naturaleza”

Hemos pasado el último fin de semana de septiembre en este hotel rural que se encuentra al final de un camino rural rodeado de fincas de animales típicos de las dehesas onubenses (como cerdos, vacas, ovejas, cabras...) y donde comienza un sendero bastante pintoresco que llega hasta el pueblo de Cor… Más

Hemos pasado el último fin de semana de septiembre en este hotel rural que se encuentra al final de un camino rural rodeado de fincas de animales típicos de las dehesas onubenses (como cerdos, vacas, ovejas, cabras...) y donde comienza un sendero bastante pintoresco que llega hasta el pueblo de Cortegana. Lo primero que hay que tener claro es saber a dónde se va, ya que no hay nada de cobertura móvil (la ubicación es naturaleza pura en la sierra de Huelva) y solo tienen wifi en la zona común de restaurante y recepción. Si necesitas hacer alguna llamada urgente, te brindan el teléfono fijo de la recepción. El alojamiento dispone de 3 zonas diferenciadas: la recepción y restaurante donde se encuentran los huéspedes para las comidas, charlar o hacer juegos de mesa, la zona de piscina que ya se encontraba cerrada por ser fuera de temporada estival, y por último la zona de las cabañas. Cada cabaña es una habitación. En nuestro caso elegimos una cuadruple para 2 adultos y 2 niños. Estaba bastante bien, aunque es cierto que en algunos detalles le va tocando un poco de mantenimiento (puerta del baño que rozaba en el suelo, la cerradura de la puerta costaba abrirla, sillas un poco descuadradas del uso, pomos de cajones que se caían...) aunque lo importante como es la limpieza del baño y comodidad de las camas si fue correcto y sin nada que señalar. La cabaña de hecho está bien aislada, puesto que hemos pillado temperaturas nocturnas bastante bajas (8° grados) y no hemos pasado nada de frío. El agua de la ducha también salía con fuerza y bien graduada. Hay que tener en cuenta que nos encontramos en un hotel de 2 estrellas, por lo que en la habitación vas a encontrar lo imprescindible: toallas, gel de baño, papel higiénico, un par de vasos, 2 enchufes, pastilla de jabón para las manos y sábanas limpias. Habíamos elegido media pensión con la idea de hacer desayuno y cena en el hotel. Tanto una comida como la otra han estado genial. No conozco ningún hotel de 4 o 5 estrellas donde te reciban en el desayuno con un plato de jamón de la sierra de Huelva como hemos visto aquí. Luego puedes completar con lo normal de un desayuno español en la zona de bufet (café, zumo, tostadas de pan de pueblo, galletas, cereales, fruta, todo tipo de patés y mantequillas, aceite, tomate...). La cena es tipo menú con 2 platos pan y postre a elegir de una lista. La bebiba se cobra aparte pero a precios razonables. El menú para niños solo es un plato en vez de 2, pero vienen bastante generosos y tienen más variedad para elegir lo que a ellos les suele gustar. Si decides pasar la tarde en la posada, también disponen de bar-cafetería y bollería para merendar o tomar algo. El sábado por la tarde, una animadora organizó diferentes juegos y actividades con los niños: tiro con arco, fútbol, dibujo, juegos de mesa, minisendero para echar de comer a los cerdos más cercanos... los niños no se han acordado de las "pantallitas" en ningún momento y han socializado entre ellos pasándoselo genial. En nuestro caso aprovechamos para hacer el sendero que parte de la posada (los molinos de cortegana), el cual es bastante recomendable y muy bonito, ya que se ven los restos de los antiguos molinos en la margen del río, el cual hace que en algunos momentos parezca el paisaje de un cuento. Si quieres llegar al pueblo por este sendero, se tarda un par de horas, tapeas o almuerzas algo por allí (se puede aprovechar para visitar el castillo de Cortegana por 2 € la entrada) y tomar de nuevo el sendero de vuelta hasta la posada. En definitiva, recomiendo el lugar para conectar con la naturaleza unos xíasen un entorno muy bonito.

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“LUGAR PARA DESCONECTAR EN POSITIVO”

HEMOS ESTADO DEL 6AL 8 SEPTIEMBRE EN LA 2 Y 3 LA EXPERICIA MUY BUENA CON LOS NIÑOS Y MAYORES AMBIENTE FAMILIA, TEMA COCINA BUENISIMA,TRATO ENTRE TRABAJADORES ESTUPENDO LIMPIEZA MUY BUENA , SITIO ESTUPENDO PARA DESCONECTAR, DEJAR LOS MOVILES ES LO MEJOR , GRACIAS REPETIREMOS.

“Naturaleza en familia”

Ambiente familiar, te hacen sentir como parte de una familia, empleados serviciales y amables, en especial, Sandra, la monitora y Sara del personal de sala. Comida de calidad y bien cocinada, lo mejor de lo mejor. Lo único negativo fue que el retrete de nuestra cabaña comenzó a tirar agua en nuestr… Más

Ambiente familiar, te hacen sentir como parte de una familia, empleados serviciales y amables, en especial, Sandra, la monitora y Sara del personal de sala. Comida de calidad y bien cocinada, lo mejor de lo mejor. Lo único negativo fue que el retrete de nuestra cabaña comenzó a tirar agua en nuestro primer uso, pero Cristián lo arregló y no volvió a dar problemas. Lo recomiendo y volveremos!

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“Malísima”

He estado 4 noches en ese mal llamado hotel. La cabaña la 3 que me asignaron, ha visto días mejores, la puerta de entrada descuadrada, el mobiliario de la cabaña, en cualquier rastro los hay mejores, el teléfono que debería servir para llamar a recepción sin cable e inservible, para ir a la piscina… Más

He estado 4 noches en ese mal llamado hotel. La cabaña la 3 que me asignaron, ha visto días mejores, la puerta de entrada descuadrada, el mobiliario de la cabaña, en cualquier rastro los hay mejores, el teléfono que debería servir para llamar a recepción sin cable e inservible, para ir a la piscina hay que jugarse la vida, por una carretera sin arcén y muy mal pavimentada, está muy lejos de las cabañas. La comida es buena, la limpieza de la habitación, regular. Y por último cimentar, que los Martes es día de barbacoa, después desa Cena, coge el micrófono un tío, que se llama cantante y hasta las 12 de la noche nos obsequia con sus alaridos. O sea que hasta que ese hombre se canse ni hay quién descanse, el tema de internet es gratis, como dice el a ununcio, pero sólo en la recepción y el comedor, si te encuentras mal y necesitas ayuda, en tu cabaña , lo tienes crudo. Es un lugar , donde no se respeta el descanso de los clientes y no duermes hasta las 12 de la noche. Es mi experiencia, por supuesto no volveré ni lo recomiendo a nadie. He estado desde el lunes basta hoy y deseando venirme.

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