“Pros y contras”

El hotel está ubicado a una distancia razonable de la estación de metro Viktoria (diez minutos a pie) en un vecindario de clase trabajadora con muchas familias inmigrantes. Los restaurantes también se encuentran a cinco o diez minutos a pie y hay muchos pequeños mercados alrededor del hotel donde c… Más

El hotel está ubicado a una distancia razonable de la estación de metro Viktoria (diez minutos a pie) en un vecindario de clase trabajadora con muchas familias inmigrantes. Los restaurantes también se encuentran a cinco o diez minutos a pie y hay muchos pequeños mercados alrededor del hotel donde compramos frutas y bocadillos. El personal del hotel fue increíble e hizo todo lo posible para complacernos, especialmente Helena en la recepción, que fue excepcionalmente amable. La habitación básica económica era adecuada y venía con un pequeño televisor alto, definitivamente LG montado en la pared. El WIFI era gratuito y la señal era fiable. Se solucionó de inmediato un problema menor con una manguera de ducha rota. No había escasez de agua caliente (es necesario dejar correr el agua caliente durante un par de minutos por la noche para purgar la tubería). Toallas limpias todos los días y las camas siempre estaban hechas para nosotros cuando llegábamos a casa. El único aspecto negativo fue que los colchones de nuestra habitación eran duros como una roca, pero puede que solo fuera nuestra habitación. En general, recomendaría el hotel a los viajeros. FYI: Nos costó 36 euros desde el hotel hasta el aeropuerto.

Menos

“¿y el hidromasaje que me vendieron?”

Para empezar no había hidromasaje (la ducha no se colgaba y en los 5 días no lo solucionaron). Lo peor es que por las noches costaba mucho dormir, ruidos molestos y gritos (las 5 noches igual) provenían de la calle.